Estaba parado solo sobre el acantilado más alto,
miré abajo, alrededor, y todo lo que pude ver
fueron aquellos a los que amé profundamente y compartí
estrellarse absolutamente a ciegas con el mar...
Intenté preguntar qué juego era éste,
pero sabía que quizás no lo jugaría:
la voz, como una, como nadie, vino a mí...
'Hemos mirado sobre los héroes
y ellos se encuentran ausentes;
hemos mirado difícilmente a través de la tierra,
pero no podemos ver ningún amanecer;
ahora nos hemos atrevido a secar el cielo,
pero aún sangramos;
estamos dibujando cerca de los acantilados,
ahora nosotros podemos oír la llamada.
Las nubes se amontonan en formas de montañas,
no hay ningún escape excepto el ir adelante.
No nos pregunten por una respuesta ahora,
es demasiado tarde para aceptar esa convención.
¿Qué rumbo se ha dejado sino* el morir?
Hemos mirado sobre los Altos Reyes,
encontrándolos menos que mortales:
sus nombres son polvo antes del justo
avance de nuestra joven, nueva ley.
Las mentes vacilan fuerte, nos lanzamos
hacia el oscuro portal;
Nadie puede detener nuestro salto final
hacia dentro de las desconocidas profundidades.
Y como los ancianos golpean sus frentes
saben que realmente es demasiado
tarde ahora para detenernos.
Porque si el cielo es muerte sembrada
cuál es el punto en que recobraremos la respiración? -
bótala.
¿Qué causa se ha dejado
sino morir
en búsqueda de algo de lo que no estamos seguros?
¿Qué causa se ha dejado sino morir?
... Realmente no sé porqué...
Sé que nuestros finales pueden ser pronto
pero porqué los haces más pronto?
El tiempo puede finalmente probar
que solamente la vida se mueve
y ninguna vida se sostiene en la arena movediza.
Sí, sé que está
fuera de control, fuera de control:
La maquinaria grasienta resbala en los rieles,
las mentes jóvenes y los cuerpos en rayos de acero
empalados...
Dientes que rasgan los huesos, dientes que rasgan los
huesos;
Los monstruos de garganta de hierro están forzando los
gritos,
La mente y la maquinaria encierra - presiona los sueños...
... pero todavía hay tiempo...
Cobardes son aquellos que corren hoy,
la batalla está comenzando…
no una guerra con cuchillos, peleamos con nuestras vidas,
los
Lemmings no nos enseñan nada,
la muerte no ofrece esperanza, debemos buscar
por la respuesta desconocida:
unamos nuestra sangre, disminuyamos el derramamiento,
prevengamos el desastre.
Hay otras maneras además de gritar en multitudes:
eso nos hace meramente dientes del odio.
Mira el porqué y el dónde estamos,
mírense a sí mismos y a las estrellas en el fin.
¿Qué elección hemos dejado sino el vivir
en la esperanza de salvar
a nuestros niños pequeños?
¿Qué elección hemos dejado sino el vivir
para salvar a los pequeños?
¿Qué elección hemos dejado sino el intentar?